El peor error de Macri

Lo tuve delante de mis ojos todo este tiempo y en realidad no lo había visto. Pero ahora que lo comprendí llegué a la conclusión que el peor error que ha cometido (y está cometiendo) nuestro presidente Mauricio Macri es de proporciones Bíblicas, al estar definido en un pasaje de las Escrituras Sagradas del Cristianismo.

Cuando Jesús confronta a los Fariseos acerca de la manera en que daban sus ofrendas a Dios y la correspondencia de tales ofrendas con lo que realmente había en sus corazones; en unas pocas palabras que pasan casi inadvertidas da la clave de lo que entiendo está sucediendo. Esto ocurre en el evangelio de Lucas, capítulo 11 y versículo 42 que reza en su parte final “Esto os era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello”

Parafraseando un poco: es necesario hacer lo actual, pero no se debe dejar de lado lo anterior.

Si nos retrotraemos a las primeras medidas tomadas por Macri al inicio de su gestión, todas fueron celebradas por propios y ajenos, nombro sólo algunas de las que podríamos encasillar dentro del “era necesario hacer”

* Terminar con el festival de designaciones dentro de la planta estatal. Recordamos sólo el caso como muestra de la Biblioteca del Congreso de la Nación, que contaba con una planta de trabajadores más grande que la cantidad de libros que prestaban por mes.

* Terminar con el aislamiento del mundo a través de un sistema aduanero de amigos y corrupción. Acercándonos nuevamente a la escena mundial (no hablo de FMI para los que quisieran criticarme) a través de volver a relacionarnos con todo el mundo y o con sus parias.

* Comenzar a realizar obras de base, estructurales, que sientan la infraestructura sobre lo que el resto del país girará: caminos, ferrocarriles, electricidad, cloacas, etc.

Y podríamos seguir nombrando tantas otras, todas muy buenas, todas positivas, pero no por ello suficientes.

El peor error de Macri fue creer que podía gobernar sólo con la primer parte del versículo citado “esto os era necesario hacer”. Había muchas cosas que eran necesarias de hacerse, pero no se podía descuidar el tejido social sobre el cual se hacían.

Fue como lanzarse a trabajar con desenfreno pero sin tomar las medidas de seguridad que permitirían no sólo que el trabajo se haga, sino que se haga sin riesgos, que se haga bien, que se llegue al final en una sola pieza.

Doy un ejemplo de esto, la regulación del mercado.

Pasamos de un sistema proteccionista a un sistema de autorregulación que en estos días llevó al dólar a un histórico máximo y a el fracaso del “plan nada” en boca un periodista de Ámbito Financiero. ¿En serio Macri creyó en la responsabilidad social del empresariado Argentino? Es como si el dueño de algún holding nacional, el dueño de algunos millones de pesos o dólares se sentara un segundo a pensar si vendiendo o comprando moneda o acciones le haría algún daño a alguien.

¿Se puede abrir el mercado y desregularlo (esto es necesario hacer)? Sí claro, es necesario ¿Hay que dejar todo librado a que el mercado lo regule? La respuesta es un rotundo no, debe haber una intervención garantizada del estado que nos brinde una colchoneta ante los escrúpulos de aquellos que no reparan en el otro (sin dejar de hacer aquello).

El gran error de Macri fue creer que haciendo caminos (esto os es necesario hacer), los empresarios automáticamente tomarían 50 empleados más en blanco diciendo “qué hermosa ruta tenemos ahora, vamos a fabricar el doble”. La ruta era necesaria, así como la contención hasta que ese trabajo efectivamente venga (sin dejar de hacer aquello)

El gran error de Macri fue creer que con la reparación histórica a jubilados (esto os era necesario hacer) ya les alcanzaría para los remedios que se quitaron del plan nacional de asistencia, cuando no fue así (sin dejar de hacer aquello).

Es cierto que hay derechos conquistados que más que derechos parecen privilegios y necesitan una revisión, pero hoy convivimos con vecinos que ya no piensan en derechos, piensan en de qué manera van a comer, y no son “vagos que le escapan a la pala” como todos piensan.

Estos días circulaba una aplicación de redes sociales que mostraba cómo es que cada uno de nosotros fue creado por Dios, un poco de esto, un poco de aquello, un poco de esto otro, y zaz hemos sido creados.

Ponga un poco de lo mejor de Macri, agréguele unas gotas de lo mejor de Cristina, mezcle con pizcas de Salvador Allende, Perón, Frondizi, Putin, Mao o quien Usted quiera. Puede imaginar su propio monstruo, mientras seguimos pagando los platos de este gran error de Macri.

Mariano Manuel Zavala
Últimos artículos de Mariano Manuel Zavala (Ver todos)

El último “Día de los trabajadores” con el macrismo en el poder

El primero de mayo de 2019 será recordado como el último “Día de los trabajadores” con el macrismo en el […]

SECHEEP: Abandono y muerte

Hablando de que no se invierte, las cosas inevitablemente suceden, como la muerte de Abril Verón la mañana del 22 […]

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *