Donald Trump sorprendió ayer al afirmar que Irán no está venciendo en el actual conflicto contra Israel, y urgió a iniciar un diálogo inmediato para “evitar una catástrofe” regional. Sus declaraciones fueron recogidas durante su salida anticipada de la cumbre del G7 en Canadá, evidenciando su preocupación por los riesgos de una guerra abierta.

Desde Canadá, Trump precisó que Teherán “no está ganando esta guerra”, pero “debería hablar antes de que sea demasiado tarde”. Según él, Irán busca una salida diplomática, aunque Estados Unidos y sus aliados deben presionar para que se sienten en una mesa de negociación.

Las advertencias del expresidente ocurren en un momento crítico: el pasado 13 de junio, Israel lanzó un ataque masivo contra instalaciones nucleares iraníes, en lo que definió como “Operación León Ascendente”, mientras Irán respondió con misiles y drones que impactaron en ciudades israelíes.

Trump, quien regresó de Canadá para presidir una reunión de crisis del Consejo de Seguridad Nacional, enfatizó que EE.UU. busca que Irán abandone su programa nuclear y acepte negociaciones bajo condiciones estrictas. Sin embargo, su postura es contradictoria con su rechazo a respaldar una declaración conjunta del G7 que llamaba a una desescalada inmediata del conflicto.

Situación caliente en el terreno:

• Israel fue el responsable de lanzar más de 330 municiones en el ataque del 13 de junio contra posiciones nucleares y militares iraníes.
• Irán respondió con decenas de misiles balísticos y drones, causando destrozos en ciudades como Tel Aviv, Jerusalén y Haifa, y provocando más de 90 heridos.

Mientras aboga por el diálogo, Trump exige que Irán se rinda por completo y advierte que EE.UU. “no tolerará un Irán con armas nucleares”. Su discurso mezcla diplomacia con presión militar, presumiendo la necesidad de una tregua—siempre y cuando Teherán cumpla con sus compromisos.

En resumen, Trump intentó posicionarse como mediador y defensor de Israel a la vez, sin conceder un centímetro a Irán, lo que intensifica una crisis que amenaza con expandirse más allá de Oriente Próximo.