Encabezada por una amplia coalición de estudiantes, docentes, no docentes y autoridades universitarias, se está llevando a cabo una marcha de gran envergadura en distintas ciudades del país, con especial foco en la Ciudad de Buenos Aires.

Este martes, una multitud de personas se ha congregado para exigir un aumento en el presupuesto destinado a las universidades públicas, tanto para gastos operativos como para los salarios del personal. La protesta ha alcanzado una notable participación en las principales urbes argentinas, destacándose la movilización en la Ciudad de Buenos Aires, donde decenas de miles de manifestantes han marchado desde el Congreso hasta la Plaza de Mayo.

La protesta ha logrado una amplia convocatoria, con la adhesión de las centrales obreras de la CGT y la CTA, así como de diversos sindicatos, organizaciones sociales y figuras políticas de diferentes partidos.

Se ha hecho hincapié en la difícil situación que atraviesan las universidades debido a las políticas implementadas por el Gobierno nacional, según advirtieron desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), entidad que reúne a los rectores de las universidades públicas nacionales. En palabras de Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la Federación Universitaria Argentina, las universidades son fundamentales como motores de la democracia, la producción y la cohesión social.

Las manifestaciones también se han extendido a otras ciudades, como Resistencia, donde se congregaron manifestantes en el Campus de la UNNE y se dirigieron hacia la Plaza 25 de Mayo para llevar a cabo un acto central.

En la Ciudad de Buenos Aires, la marcha comenzó en la Plaza Houssay, donde miles de estudiantes universitarios se reunieron para expresar su reclamo. Se espera que representantes de las universidades nacionales lean un documento en Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, reiterando la demanda principal: la necesidad de aumentar el presupuesto universitario.