El reordenamiento del peronismo y la derrota electoral a nivel nacional dejó vacante el lugar del liderazgo del principal movimiento político de occidente que, tímidamente, busca ocupar el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.En su interior, Kicillof tiene dos bases en las que apoya sus fundamentos políticos.

Por un lado, la estructura de central obrera que hoy lo representa Roberto Baradel. Por otro lado, los intendentes del peronismo, que tienen su organización en La Mesa de Ensenada.De éste último espacio, hay un intendente que busca la épica y se mueve con las intenciones de ser el sucesor natural de Axel Kicillof en 2027: Jorge Horacio Ferraresi de Avellaneda.

Ferraresi es un ingeniero que siempre estuvo ligado a la militancia política en el peronismo, de la mano de su inspirador Baldomero Álvarez, que llegó a la intendencia durante los 90 y una segunda etapa en 2003. Así, el Tano, se hizo de poderío siendo secretario de Obras de un Avellaneda que cambió por completo y dejó atrás ser el patio trasero de Capital Federal.

Cuando Álvarez se fue como Ministro de Desarrollo de Daniel Scioli, Ferraresi tomó el poder de Avellaneda casi por asalto y se quedó con todo. Desde que asumió el poder, lo ejerció. Al fin estilo del peronismo.Hoy es parte esencial de la Mesa de Ensenada, fundada al calor de la oposición a María Eugenia Vidal y Mauricio Macri, pero consolidada con la gestión de Axel Kicillof.

Junto a Mario Secco (Ensenada) y Fernando Espinoza (La Matanza), son el principal sostén territorial del gobernador.La intención del gobernador es ser el principal dirigente del peronismo para suceder a Javier Milei. Sin embargo, para ello necesita fortalecer la Provincia y Ferraresi es quién busca acomodar sus alfiles, ponerse por encima de las internas y quedarse con la conducción partidaria.

Ferraresi levanta la voz para cuestionar al hijo de la expresidenta y al mismo tiempo envía gestos hacia dentro del partido, se reúne con dirigentes a los que el camporismo vetó, como son Juanchi Zabaleta o Néstor Grindetti.La salida que le encontró Ferraresi es ser la principal cara contra el DNU y la Ley Ómnibus de Milei buscando su 17 de octubre: “¡Todos y todas al Avellanedazo!”.

“La unión y compromiso de las y los ciudadanos es indispensable para frenar este atropello a la Patria. Por esto, también, acompañaremos el paro del 24 de enero. Construir un movimiento social que se oponga a los retrocesos que nos impone el gobierno nacional es la única salida”, marca Ferraresi.

El otro dato de color, con el inicio de las sesiones extraordinarias en Avellaneda, se estrenó un bloque oficialista: Ferraresi gobernador 2027.