El personal esencial y en blanco del Hospital Central de la provincia de Formosa se desayunó este jueves con una triste noticia mediante un comunicado firmado por la directora Graciela Viera al que accedió NOVA. En el mismo se indica que, debido a que el tomógrafo del nosocomio público está averiado, los estudios deberán realizarse en otras instituciones.
Por lo tanto, “es necesario en algunos casos el acompañamiento por médicos residentes o de planta, según disponibilidad del servicio que lo requiera, y otros integrantes del equipo de salud, según la complejidad del paciente”, se lee en el escrito. Además, solicitan de la “colaboración y predisposición para la realización de dicha tarea en su horario laboral o de guardia”.
Mientras circula el mensaje por un tomógrafo descompuesto y el gobernador Gildo Insfrán se jacta de tener el mejor sistema de salud de todo el país, el personal del hospital público de la provincia, está en alerta porque verá reducido su salario por guardias pasivas a partir de mayo próximo.
