La discusión respecto a la auditoría de las Universidades es absurda: el art 75 inc 19 de la Constitución Nacional establece que el Congreso debe sancionar leyes de organización y base de la educación (…) que garanticen la Autonomía y la Autarquía de las Universidades Nacionales.
Por esto que los Consejos Superiores de cada una de ellas (conformados a través de elecciones democráticas en cada uno de los claustros) y los Rectores, como autoridades unipersonales, son los responsables de definir cómo y en qué se gasta el Presupuesto, por el que DEBEN RENDIR CUENTAS.
Si existen hechos de corrupción, deben ser investigados y juzgados por la Justicia. El Presidente y sus funcionarios NO PUEDEN acusar a todas las Universidades de corruptas, así como no puede acusar a todos los diputados de ratas ni a todos los periodistas de ensobrados
Mientras tanto, el reclamo del Sistema Universitario sigue vigente y goza de legitimidad: hace falta actualizar el Presupuesto para gastos de funcionamiento, mejorar salarios y volver a habilitar obras de infraestructura, programas y becas para garantizar Educación de Calidad.