Democracia: “Sistema político que defiende la soberanía del pueblo y el derecho de este a elegir y controlar a sus gobernantes”. Una premisa que incumplen los dictadores de la región que esta semana iban a ser recibidos con alfombra roja por el presidente Alberto Fernández, decisión que fue ampliamente rechazada tanto desde el arco opositor como desde la comunidad venezolana radicada en Argentina, entre otras entidades y organizaciones.

En el marco de la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que se desarrollará en el Hotel Sheraton de Retiro, estaba previsto el arribo de una cantidad determinada de jefes de Estado, incluidos los que se destacan ante el mundo por sus repudiables “gestiones” antirepublicanas. Sin embargo, la lista se achicó a horas del inicio del evento.

Los presidentes populistas de Venezuela, Nicolás Maduro; Nicaragua, Daniel Ortega, y Cuba, Miguel Díaz Canel; que con sus políticas solo han fomentado el horror, la miseria socioeconómica y la pobreza extrema, habían confirmado su presencia, pero este lunes los dos primeros pusieron reversa y decidieron pegar el faltazo.

A pesar de la ola de críticas que despertó la llegada de estas polémicas figuras, días atrás Alberto Fernández salió en defensa de Maduro al remarcar que “está más que invitado” a la cumbre, ya que “Venezuela es parte de la CELAC”.

Al conocerse esta afirmación, la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, realizó este domingo una presentación ante la Administración para el Control de Drogas (DEA) para solicitar la captura del dictador venezolano. “Es muy importante luchar contra los políticos involucrados en organizaciones criminales; esta colaboración es por el bien de nuestras democracias”, dijo, y agregó: “Los derechos humanos no tienen ideología. Y no porque seas un dictador de izquierda, podés no respetarlos”.

Cabe recordar que desde 2020, se mantiene vigente una recompensa de 15 millones de dólares del Departamento de Estado norteamericano por la captura de Maduro, acusado de narcoterrorismo bajo la pantalla del Cartel de los Soles, organización criminal compuesta por funcionarios y militares venezolanos. También es señalado por instrumentar “un plan orquestado en los niveles más altos del gobierno para reprimir la disidencia mediante crímenes de lesa humanidad”.

El ex presidente Mauricio Macri también se pronunció al respecto en redes sociales, al considerar que “la inmensa mayoría de los argentinos” sienten “vergüenza de que nuestro país se asocie con otros donde hay persecución, tortura, narcoterrorismo, presos políticos y elecciones fraudulentas que se burlan de la democracia”.

“La bienvenida a estos dictadores no la organizamos nosotros los argentinos, sino un gobierno que languidece en su mediocridad”, enfatizó.

Por su parte, el Foro Argentino por la Democracia en la Región (FADER) presentó una denuncia ante la Justicia Federal contra los tres dictadores regionales por violaciones a los derechos humanos. Además, expresó su preocupación por la invitación que les extendió Fernández.

En cuanto a Cuba, no hay elecciones libres “desde que la dictadura castrista tomó el poder en 1959″, expresaron, y destacaron que según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en Nicaragua “han sido asesinados más de 600 ciudadanos en los últimos meses, y la mitad de las organizaciones sociales que brindan asistencia en los barrios fueron clausuradas”.

En esa línea, la FADER manifestó que la invitación del mandatario nacional “es una provocación para toda la sociedad argentina que respeta, valora y desea vivir en democracia”.

El bloque de Diputados Nacionales de la UCR se sumó a las manifestaciones en rechazo a estas visitas. “Es una provocación a nuestro país, a las democracias de Latinoamérica, y sobre todo a los ciudadanos venezolanos, nicaragüenses y cubanos que, huyendo de la represión y el hambre, buscaron comenzar una vida diferente en la Argentina”, dijeron, y añadieron que “el kirchnerismo lleva varios años dilapidando una larga tradición argentina en defensa de los derechos humanos y la democracia”.

Hace poco más de un año, el presidente argentino pronunciaba: “Todos sabemos lo que valen los derechos humanos en estos tiempos en que la democracia es asediada por posiciones extremas e intolerantes”.

“Hoy celebramos el Día de la Democracia que conmemora aquel 10 de diciembre que terminó con la tragedia argentina de la dictadura genocida que nos tocó vivir en un país que, de Néstor en adelante, ha hecho gala de trabajar incansablemente porque los derechos humanos se respeten y los derechos violados en el pasado sean enjuiciados y castigados como corresponde”, destacaba AF a fines de 2021, en un acto en el que premiaban a Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo; y Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora.

Con esas mismas manos, Fernández estaba dispuesto a saludar a los jefes de Estado regionales acusados de crímenes de lesa humanidad, similares a los que sufrió la Argentina en la época más oscura de su historia.